William Fabián visto por Hebert Domínguez

Sólo tuve que decirle de pasada a Hebert que me hablara de William Fabián, y de la relación de Porno Para Ricardo con Eskoria. Y Hebert me soltó esta andanada, que les reproduzco sin edición alguna en forma de entrevista de una sola pregunta, que fue: ¿Qué me puedes decir de William?

A Wiliam Fabián lo conocí en el parque, el maldito parque de la calle G, tan acechado por el enemigo (uniformes azules y pistolas).

A finales de 2005 estaba yo pasando a ser parte de Porno y por supuesto los punkis tienen que conocerse, así que nos presento un desconocido, creo que Pedrito.

La primera impresión se me hizo familiar, me habia aterrorizado años atras cuando vi a Gorki por primera vez. Ver a un tipo con actitud de rock&roll es realmente impresionante, le prejuician a uno tantos años de penetración cerebral comunista... quien estudie en una secundaria de Cuba sabe de qué hablo, me hace ponerme a la escucha.

Esa noche, que no era sábado por suerte, odio los sábados, nos tomamos una botellas de ron y estuvimos allí haciendo lo que se hace en ese lugar: perder el tiempo. Esa noche no. No pasó mucho tiempo y pude notar que este personaje gozaba del cariño y respeto de todos los que le conocían. Con tanta música que hay en Cuba es casi imposible tener una grabacion de Eskoria, así que me conformé con saber que cantaba el Cadillac del Loquillo y con el nombre de su banda.

Como siempre hay una brecha, un día disfruté de ellos en el Salón Rosado de la Tropical y los culos de las jevitas frikis se hicieron pequeños ante las libras de sinceridad que entregaba esta banda, yo dije: ¡Cojones, hay una banda de rock en Cuba, al fin, por fin! ¿dónde estaba yo? estabas aquí, sólo que esa banda es de Santa Clara y no viene tanto, me respondió la voz.

Por primera vez en mi vida yo podía entender lo que cantaba un cantante de rock en Cuba y sentía que se dirigía hacia mí, se me hizo muy sencillo y mi cerebro necesitado captó cada acorde y verso de sus canciones. Esa noche cuando fui a saludar a William, no se acordaba de mí, pero igual me fui con la banda a tomar ron y hablamos más, ya yo sabía que siente un músico después de un entrega semejante, es fácil contagiarse con tanta energía, sobre todo de ésta. No me sorprendí cuando le pedí su música y me respondió que no la tenía: eso es casi natural en Cuba.

Pasó el tiempo y un día caí en Hoguín gracias a unos amigos y me encontré entre una muchedumbre nocturna al Pollo, que en esos días tocaba el bajo con Eskoria. William tenía tan mala memoria que tampoco pareció conocerme, ellos tenían varios conciertos esa semana en Las Romerías de Mayo que hacen allí. Luego de dos años sin tocar en una escena y con un hambre de volumen que no me cabía en el cuerpo subí al escenario y me vi tocando El Cadillac junto a ese tipo que no me conocía y por si no quedé satisfecho me volvió dar el bajo en la última canción de ese día y remató diciendo: ¡que no nos llege la policía, este es el bajista de Porno Para Ricardo!

Esa noche hubo también tres bajistas: Karel, El Pollo y yo, suerte de hermandad de los que tocamos este instrumento. No me cabía una gota de felicidad más, William Fabián tuvo el valor de pasarse ese día a todas las instituciones y bandas de rock nacional de Cuba por el forro de sus santísimos cojones y subir a tocar con él a un músico de la banda prohibida por los dueños de este país. Ya yo habia sufrido suficientes NO, hasta de mis amigos, pero el tipo no estaba conforme parece, tambien invitó a Porno Para Ricardo a su espacio en el Mejunje de su ciudad el año pasado y se hizo el concierto que muchos trataron de impedir por mucho tiempo, Eskoria y Porno sonando juntos, el único que faltaba allí era Gorki, pero de alguna manera estaba, es el mejor concierto que he pasado y dudo superarlo si de futuro se trata.

A los que dictan y prohíben y reprimen y maltratan, dedicaba William sus canciones, de esa manera se cagó y denunció toda la mierda que es este país y sus dirigentes. En Cuba es difícil tener el valor de ser uno mismo y expresarse como individuo pero para William esto nunca fue problema....